Barras Químicas
Las barras químicas son electrodos conformados por cañerías de cobre, rellenas con sales químicas solubles en agua. A las que se le realizan perforaciones en su estructura de cobre, con la finalidad de que dichas sales una vez diluidas en su interior como relleno, salgan al exterior mezclándose con el terreno donde fue instalada la barra química. Comportándose como raíces que se expanden por el terreno donde se han instalado.
Estas barras químicas, por ser dependientes los químicos que llevan en su interior necesitan un mantenimiento periódico, el que consiste en: Reposición del relleno de sales solubles durante toda su vida útil, para mantener su eficacia, y su estructura en óptimas condiciones, con valores de resistencia de la puesta a tierra que no sobrepasen los límites permitidos o calculados para el proyecto en el cual se han implementado.
De no hacer estas mantenciones y reposición de sus sales, podría perder su eficacia, y dañar su estructura.
Las barras químicas, al igual que las barras de grafito, y todo tipo de electrodo de estructura conductiva, debe calcularse con respeto a las características del terreno a intervenir, mediante un sondeo eléctrico vertical y posterior cálculo del dicho electrodo. Estos electrodos son recomendados en instalaciones eléctricas donde no es posible instalar una malla de tierra reticulada convencional por espacio o por dificultad para ejecutar excavaciones, puesto que los electrodos químicos ocupan un espacio muy reducido permitiendo lograr resistencias bajas en poco espacio. En casos donde los terrenos son de muy altas resistividades se necesitan mas de un electrodo ya sea barra química o barra de grafito. y para implementar la cantidad de electrodos en cualquiera de los dos casos, se necesita realizar un estudio en el lugar donde se implementará la puesta a tierra, luego del estudio o sondéo eléctrico vertical y calculo de electrodos podremos saber cuantos electrodos se deben instalar.